El pequeño croata que enamora al mundo.

Luka Modric va a pasos agigantados enamorándonos día a día a base de un juego increíble que no ha hecho más que asombrarnos a todos los amantes del deporte rey.

El mundial rueda, los reflectores se encienden apuntando a las selecciones top y a sus estrellas, por un lado va Messi, por el otro Ronaldo, cerca aparece Neymar, Suárez es el abanderado de Uruguay, el magnífico Hazard defiende a  Bélgica, este mundial será de ellos piensan todos, lo pensé yo en su momento, me confundí, el mejor del mundial en esta oportunidad va a ser otro, uno del que sabíamos tenía una clase formidable pero aún así no lo imaginábamos en la foto principal al final del torneo, sí, esta ves fue LUKITA, fue el pequeño gigante que comanda una selección en el papel inferior a muchas otras candidatas a levantar el trofeo, fue el pequeño Modric que sacó cara por un país de no más de 5 millones de habitantes, fue el corazón de una selección que enamoró a todos a punta de una entrega formidable, la misma que fue como señale al inicio, comandada por un pequeño centrocampista de solo 1.72 metros de altura, un ¨petiso¨ que solo necesita un balón de fútbol para dibujar una escultura con los pies en una cancha de fútbol de 11 contra 11. La entrega, armonía, inteligencia, pasión y sobre todo HUMILDAD de este deportista lograron lo imposible, poner a un candidato sorpresa en la final del torneo de fútbol más importante del mundo, sí señores, el MUNDIAL, la vitrina perfecta para estampar tu nombre hasta el fin de los tiempos. El juego de este "crack" es una locura de las buenas, lo veo y me pongo feliz, este tipo de jugador enamora con su juego hasta al más exigente hincha, solo basta un pase, una maniobra, un regate para levantar a cada persona en las gradas de los estadios en Rusia, Modric es increíble, Modric hace feliz a todos, lo recalcó una ves más, el croata es de esos futbolistas que solo necesitan dar un pase profundo o quitar una bola para poner eufórico a cualquier  ser humano que realmente siente el fútbol con el corazón, su entrega es inmensa, el juego de Modric es una maravilla, la humildad en él sin duda, algo eterno.

El 14 de junio se inició el mundial de Rusia de una manera increíble, habían muchas preguntas y pocas respuestas sin resolver previo al inicio, además muchas sorpresas en esta nueva edición : Perú volvió luego de 36 años, muchas observaciones : Argentina y Messi necesitaban resultados, Francia llegaba con una manada de jugadores numerosa, Brasil llegaba como un candidato firme tras arrasar en las eliminatorias sudamericanas, ¿Lograría campeonar?, bueno habían muchas observaciones pero lo que nadie tenía en sus cálculos era que este mundial iba a darnos muchas sorpresas, una de ellas y quizás la más importante fue la gran Croacia del técnico Zlakto Dalic, la que sin duda fue la gran revelación del torneo, a paso firme llegó hasta la final, teniendo en Modric un jugador incomparable en esta cita del 2018, para mí el mejor, no hay lugar a debate, se puso el equipo al hombro sin temores, no todo futbolista lo hace de esta manera, Luka Modric o "Lukita" como lo prefieran llamar, nos dio a todos y personalmente a mí un claro ejemplo de lo que significa jugar bien al fútbol y sobre todo representar a tu país de una manera asombrosa, desde la fase de grupos quede fascinado, sabía que Modric era de los mejores del mundo pero esta cita no hizo más que confirmarlo. En el trono del que no había podido ser parte nunca, un pequeño gigante se metió en el corazón de todos a lo grande, en un escenario para mi inigualable, EL MUNDIAL, amo el fútbol, soy bendecido por ver este tipo de jugadores hoy en día, muchos dicen ¨una acción vale más que mil palabras¨, en esta ocasión y a carácter personal cambiaría una palabra, se la dedicaría a Modric, ¨una jugada vale más que mil palabras¨, sin duda si que lo vale y sobre todo si el personaje de la película que lo hace no es más que un actor secundario en cuanto a marketing se trata, estoy feliz por eso, tendemos como sociedad futbolística a enfocar o observar solo a los jugadores top del mundo, lo acepto más no lo comparto, Messi, Cristiano y Neymar son los diferentes, eso es claro, pero también hay otros con historias increíbles y con dotes futbolísticos geniales, jugadores con grandes habilidades, ellos merecen más de nuestro apoyo, démosle el mismo mediante las redes, que el mundo del fútbol no solo se centre en uno, dos o tres jugadores, hay una infinidad a la cual seguir también, nuestro trabajo como periodistas, nuestra trabajo también como hinchas es hacer esto posible. En esta cita a paso lento y sigiloso apareció este héroe croata que brilló más que el sol en un día de playa con la familia, sin decir nada, sin prometer nada, sin jalar los reflectores y la atención de la prensa, no hizo más que solo demostrar su calidad, eso aún hace más grande su logro personal, lo demás con el pasar de los encuentros de Croacia en Rusia 2018 se cuenta solo, la performance de Modric no hizo más que darle un premio personal al finalizar el campeonato, fue el mejor de todos, merecidísimo "Lukita", ahora solo falta que te den el balón de oro, no puedo botar por ti pero si por mi fuera te lo deberían dar esta temporada sin necesidad de sorteo, no hay lugar a debates, esta ves fuiste el más "bravo", sorprendiste a todos, tu lo mereces más que el resto.

Un poco de él:

Cabe resaltar que Modric no la tuvo fácil nunca, eso hace más increíble su agitada y complicada vida en sus inicios como futbolista, la Guerra de los Balcanes fue una dura batalla que Modric tuvo que pasar para convertirse en lo que hoy en día es ante los ojos del mundo futbolístico,los grandes están para ganar dichas batallas, Modric lo hizo, la tuvo difícil al inicio pero logró remontar el partido más complicado de su vida encontrando en el fútbol el mejor refugio en esos días grises en donde la "pelotita" le daba color y razón a su vida. Huir fue una constante al momento de la guerra, fue algo de vida o muerte, el escape de rato en rato, fue siempre el balón, ver esa figura redonda hizo para el todo menos complicado. Ir a un centro de refugiados en Zadar, vivir de rato en rato en infinidad de hoteles, perder a su abuelo y a su padre en el conflicto bélico no solo hicieron que la infancia de Modric quedará marcada sino también ocasionó la gran respuesta del jovencito para enfrentar al mundo como todo un guerrero, y como lo mencioné a inicio, su encuentro con el fútbol no haría más que ser una bendición para él, Modric se abriría paso por el deporte rey con tan solo 10 años, un pequeño gigante había nacido, el resto como todos sabemos es historia pura.......................

La vitrina del Zagreb, su paso magnífico por el Tottenham y su etapa cumbre en el Real Madrid, mostraron el tipo de jugador que enamoró a todo fiel seguidor del fútbol a nivel mundial a punta de un juego sin igual que cada semana no hace más que ponernos las piel de gallina cada ves que vemos la pelota pasar por los pies del pequeño gigante croata. Modric ha sido nominado esta ves para balón de oro por primera ves en su carrera, lo repito por tercera ves, ruego a dios que se lo den  , el más que nada se lo ha ganado, lo ha demostrado no solo a base de fútbol sino también a base de amor propio hacia su camiseta y a su escudo. 

En opinión personal y para ir cerrando esta pequeña reseña, este tipo de jugadores son los que el fútbol necesita, lo que hace especial a un futbolista además de la magia que posea al momento de saltar al verde, es también la humildad, amor y pasión que demuestra al momento de defender los colores de su equipo o selección, jugar bien te hace alguien grande, ser una gran persona te hace gigante, hace gigante hasta al más pequeño, Modric es el más claro ejemplo de esta figura, el croata lo demostró, esas actitudes lo hacen grande más allá de su juego con el balón, la grandeza es de los que la demuestran, Luka es el claro ejemplo, lo logró, y vaya, lo hizo en el mundial. PALMAS.